Entrada destacada

CUANDO LLEGA EL INVIERNO: BENEFICIOS DE LA EQUINÁCEA

LA MALNUTRICIÓN EN LOS ANCIANOS Y SU TRATAMIENTO


Desde hace algunas décadas asistimos al envejecimiento progresivo de la población. Los avances logrados en el mundo de la medicina, hábitos saludables, higiene y actividad física, determinan un incremento en la expectativa de vida de 20-25 años. 

Según datos del Imserso, en el año 2001 un 17% de la población era mayor de 65 años; en base a ello se calcula que para 2026 la proporción aumente a un 21,6%. 

Al igual que ocurre en otras etapas de la vida de un individuo, los problemas de salud de los ancianos reúnen una serie de particularidades que determinan la necesidad de estrategias terapéuticas específicas para ellos, sobre todo en los mayores de 80 años. 

Las recomendaciones nutricionales de este grupo poblacional tienen un objetivo doble: de un lado, la prevención y tratamiento de aquellas enfermedades cuya prevalencia va ligada a la edad; y de otro, evitar la desnutrición tan frecuente en este colectivo. 

Se sabe que un adecuado estado nutricional contribuye de forma muy positiva al mantenimiento de las funciones y actividades tanto psíquicas como físicas el individuo, mejorando la percepción de bienestar y mejoría de la calidad de vida. 

Por el contrario, un estado nutricional inadecuado aumenta la morbi-mortalidad en estos pacientes, generalmente pluri-patológicos.

Entendemos por desnutrición todo estado nutricional inadecuado bien por exceso (obesidad) o por defecto, situación esta última para la que reservamos el término malnutrición calórico-proteica. 

Generalmente, se trata de una malnutrición de tipo mixto o calórico- proteica. No debemos olvidar en estos pacientes el riego de déficit de determinados micronutrientes y minerales, especialmente de vitamina C, D y A, ácido fólico, magnesio, calcio y potasio. 

La malnutrición condiciona una situación de depresión inmunológica que incrementa la incidencia de procesos infecciosos, úlceras por presión, entorpece el proceso de cicatrización de las heridas, alarga la estancia hospitalaria y merma de forma manifiesta la capacidad funcional del individuo. 

De todo lo anterior, se deduce la importancia y trascendencia, de establecer, precozmente, el diagnóstico de malnutrición en estos pacientes, así como la instauración de estrategias terapéuticas adecuadas para su pronta resolución.

Tratamiento de la malnutrición en el anciano 

A la hora de abordar la malnutrición en un paciente anciano, hay que tener en cuenta la calidad de vida del paciente y el pronóstico vital, y aunque la edad es un factor a considerar, este hecho no debe prevalecer sobre los aspectos anteriores.

 Habitualmente, los criterios de intervención en los mayores son más flexibles; así, es más conveniente liberalizar las recomendaciones dietéticas en la medida de lo posible para mejorar la calidad de la ingesta, aunque ello suponga renunciar discretamente algunos objetivos terapéuticos con otras enfermedades. 

Los objetivos del soporte nutricional enteral/oral en el paciente anciano son: 

– Garantizar un aporte adecuado a sus necesidades de energía, proteínas y micronutrientes. 

– Mantener o mejorar el estado nutricional del paciente. 

– Mantener o mejorar la capacidad funcional y actividad del paciente o su rehabilitación. 

– Mantener o mejorar su calidad de vida. 

– Disminuir la tasa de morbi-mortalidad en esta población, en cierto modo inmunocomprometida y frecuentemente pluripatológica.

En pacientes ancianos con diagnóstico o riesgo de malnutrición, los suplementos orales son una modalidad de soporte nutricional artificial recomendada con un alto nivel de evidencia con el objetivo de aumentar el aporte de calorías, proteínas y micronutrientes, así como para mejorar el estado nutricional y la supervivencia y disminuir el número de complicaciones. 

Los suplementos orales son fórmulas nutricionales con una proporción de macro y micronutrientes conocida, completas o no, que se ingieren por vía oral con el objetivo de aumentar el aporte calórico y/o proteico en pacientes con riesgo o diagnóstico establecido de malnutrición. 

La gama de suplementos orales disponibles en el mercado es amplia; en líneas generales, se clasifican atendiendo a los siguientes ítems: 

– Kilocalorías aportadas en un mililitro: isocalóricas cuando aportan 1 kcal/ml; hipercalórica cuando un ml aporta más de 1 kcal y finalmente hipocalórica, cuando el aporte es inferior a la kcal/ml. 

– Aporte de proteínas: son hiperproteicos cuando aportan más del 18% del valor calórico total en forma de proteínas; normoproteicos cuando aportan entre el 16 y el 18%. Existen formulaciones con aporte reducido de proteínas para uso médico en situaciones como la insuficiencia renal o la hepatopatía crónica. Atendiendo a la forma de presentación de las proteínas, los suplementos pueden clasificarse en función de que las proteínas aportadas estén íntegras o se trate de un hidrolizado de las mismas. 

– En función del aporte de fibra: con o sin fibra, generalmente en forma de una mezcla de fibra soluble e insoluble. 

– En función de que aporten o no nutrientes especiales o específicos, como puede ser la suplementación con ácidos grasos, omega 3, arginina; perfil de hidratos de carbono más beneficioso para el paciente diabético, etc. 

Por tanto, a la hora de prescribir la toma de un suplemento oral debemos elegir aquel que se adecúe más a las necesidades nutricionales de nuestro paciente. Todas las fórmulas orales están saborizadas, siendo este un aspecto importante si tenemos en cuenta que el objetivo último es que el paciente se las tome. 

Los suplementos orales deben pautarse entre comidas para favorecer su toma, pues, aunque se ha visto que la toma de estos productos media hora de la ingesta no compromete el volumen total de aquella, es preferible aprovechar los periodos entre comidas. 

La hidratación y la ingesta se consideran medidas de soporte básico, por lo que se deben intentar mantener incluso en el paciente terminal. Sin embargo, en ocasiones, surge cierto conflicto ético en el paciente con soporte nutricional artificial. En dichos casos, se deben considerar las características del paciente, las opiniones de los médicos a cargo, así como de los familiares y del propio paciente.

0 comments:

Publicar un comentario

SALUD Y BIENESTAR (Pincha en la imagen)

RECETAS DE COCINA (Pincha en la imagen)

ALIMENTACIÓN INFANTIL (Pincha en la imagen)

AYURVEDA. LA MEDICINA NATURAL (Pincha en la imagen)

TODO LO QUE NECESITAS PARA TU MASCOTA (Pincha en la imagen)

EDUCACIÓN Y BUENAS MANERAS (Pincha en la imagen)