Entrada destacada

CUANDO LLEGA EL INVIERNO: BENEFICIOS DE LA EQUINÁCEA

LA SALUD CEREBRAL. ATENCIÓN Y CUIDADOS


El cerebro es el órgano más complejo del cuerpo humano y se reconoce como el centro de mando del cuerpo, que influye en todos los aspectos de la vida.

La salud cerebral es el medio de funcionamiento del cerebro en los dominios cognitivo, sensorial, socioemocional, conductual y motor, que permite a una persona desarrollar todo su potencial a lo largo de su vida, independientemente de la presencia o ausencia de trastornos. 

Numerosos determinantes interconectados relacionados con la salud física, los entornos saludables, la seguridad, el aprendizaje y la conexión social, así como el acceso a servicios de calidad, influyen en la forma en que nuestros cerebros se desarrollan, se adaptan y responden al estrés y la adversidad, dando paso a estrategias tanto de promoción como de prevención, a lo largo del curso de la vida. 

Optimizar la salud del cerebro al abordar estos determinantes no solo mejora la salud mental y física, sino que también crea impactos sociales y económicos positivos, todo lo cual contribuye a un mayor bienestar y ayuda al progreso de la sociedad.

Sin embargo, las condiciones que afectan al cerebro y al sistema nervioso en general surgen a lo largo del curso de la vida y se caracterizan por interrupciones en el crecimiento del cerebro, daño a la estructura del cerebro y/o deterioro del funcionamiento del mismo. 

Pueden manifestarse como trastornos neurológicos congénitos y trastornos del neurodesarrollo, como el trastorno del espectro autista, el trastorno por déficit de atención/hiperactividad y la parálisis cerebral; epilepsia; trastornos de dolor de cabeza tales como migraña; enfermedades cerebrovasculares tales como apoplejía; trastornos neurodegenerativos tales como demencia y enfermedad de Parkinson; trastornos neuroinfecciosos o neuroinmunológicos tales como meningitis, VIH, neurocisticercosis, paludismo cerebral y esclerosis múltiple; trastornos neuromusculares tales como neuropatía periférica, distrofias musculares y miastenia gravis; lesiones traumáticas del cerebro y la médula espinal.

La atención sanitaria y social para estas condiciones requiere colaboraciones multisectoriales e interdisciplinarias con un enfoque holístico centrado en la persona centrado en la promoción, prevención, tratamiento, atención y rehabilitación a lo largo de la vida y la participación activa de las personas con experiencia vivida, sus familias y cuidadores.

Según los últimos datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), la esperanza de vida media en España es de 83 años, pero la esperanza de vida saludable —considerando como buena salud la ausencia de discapacidad— solo llega hasta 70 años (70,4 años en mujeres frente a los 69,4 en los hombres). 

Nueve de las quince enfermedades más frecuentes entre las personas con discapacidad son neurológicas, con enfermedades como el ictus, el Alzheimer, el Parkinson o la ELA, liderando la clasificación. Y eso sin olvidar otras enfermedades neurológicas (migraña, epilepsia, esclerosis múltiple...) también muy prevalentes y con altos índices de discapacidad. Según datos de la Sociedad Española de Neurología (SEN), las enfermedades neurológicas son las responsables del 44% de la discapacidad por enfermedad crónica y del 50% de los años perdidos por discapacidad. 

Sin embargo, los hábitos de vida cerebro-saludables podrían prevenir muchas enfermedades neurológicas. Por ejemplo, hasta el 90% de los casos de ictus o más del 30% de los casos de Alzheimer y epilepsia se pueden evitar, lo que supone reducir en más de 120.000 los nuevos casos que se producen cada año en España, solo de estas tres enfermedades.

Estimular el cerebro 

Vale la pena tomar conciencia de la importancia de cuidar el cerebro, y más si lo hacemos desde niños. Una de las claves para prevenir la aparición de enfermedades neurológicas consiste en estimular el cerebro con actividades que ayuden a aumentar la conectividad entre neuronas, como aquellas que ejercitan nuestro cerebro (actividades intelectuales como leer, estudiar, socializar, jugar...) De la misma forma que hacemos ejercicio para mejorar nuestra salud corporal, todos deberíamos saber que también que hemos de dedicar tiempo a mejorar nuestra salud cerebral. 

Siete consejos para mantener un cerebro sano 

1. Realizar actividades que estimulen la actividad cerebral y te mantengan mentalmente activo como leer, escribir, memorizar números de teléfono, participar en juegos de mesa, realizar actividades manuales, completar crucigramas, aprender y practicar un nuevo idioma, etc.

2. Ejercitar algún tipo de actividad física de forma regular, mediante un deporte o bien con uno o dos paseos diarios de al menos 30 minutos.

3. Potenciar las relaciones sociales y afectivas evitando la incomunicación, el aislamiento social y el estrés.

4. Seguir una dieta equilibrada plant based, evitando las grasas animales y la sal y potenciando el consumo de frutas y verduras.

5. Llevar hábitos de vida saludables (sin alcohol, tabaco o drogas) y dormir 8 horas diarias.

6. Controlar la hipertensión, dado que es el principal factor de riesgo de enfermedades cerebrovasculares como el ictus.

7. Proteger el cerebro contra las agresiones físicas externas (uso del cinturón de seguridad en los vehículos y del casco cuando se viaja en moto).

0 comments:

Publicar un comentario

SALUD Y BIENESTAR (Pincha en la imagen)

RECETAS DE COCINA (Pincha en la imagen)

ALIMENTACIÓN INFANTIL (Pincha en la imagen)

AYURVEDA. LA MEDICINA NATURAL (Pincha en la imagen)

TODO LO QUE NECESITAS PARA TU MASCOTA (Pincha en la imagen)

EDUCACIÓN Y BUENAS MANERAS (Pincha en la imagen)