Para la salud, el té verde (Camellia sinensis) es un auténtico torrente de antioxidantes (un 3% de polifenoles), que ayudan a retrasar el envejecimiento y a fortalecer el equilibrio energético y las defensas del organismo.
Sus hojas contienen minerales: selenio, calcio, cromo, magnesio, manganeso, hierro, zinc... y vitaminas: A, B2, B9, C y E.
Y posse un sinfín de virtudes, entre ellas la de favorecer la eliminación del colesterol LDL (el malo) y en cambio puede aumentar el HDL (el colesterol bueno).
También ayuda a combatir los triglicéridos y las enfermedades cardiovasculares (efecto coágulos).
El matcha es una variedad japonesa de té verde que tiene aún más beneficios para la salud. Por su sabor y su atractivo visual se ha convertido en un ingrediente más para cocinar, sobre todo en repostería. Por ejemplo, en forma de riquísimos bizcochos con té matcha. Y hoy en día es cada vez más fácil de encontrar en los comercios.
Los beneficios para la salud de este té son superiores a los de cualquier otra clase de té verde, ya que al beberlo se ingiere el resultado de triturar la hoja entera hasta convertirla en un fino polvo y sin que pierda ninguna de sus propiedades. Puede decirse, en términos de valor nutricional y contenido de antioxidantes, que un vaso de té matcha equivale a diez vasos de cualquier otra variedad de té verde.
Los polifenoles (catequinas), sustancia química presente en la planta del té y responsables de su sabor amargo, son un poderoso elemento antioxidante, al que se le reconoce un papel notable en la prevención del cáncer, enfermedades cardiovasculares y la enfermedad de Parkinson.
Se sabe además, según unos estudios de la Universidad de San Francisco, que los polifenoles del té verde pueden potenciar la presencia en el cerebro de dopamina, sustancia clave para desarrollar estados de humor positivos.
También ayudan también a mantener constante el suministro de glucosa al organismo, con lo que contribuyen a regular la insulina de forma natural.
0 comments:
Publicar un comentario